Abdías es el libro más corto del Antiguo Testamento. Su nombre significa “siervo de Jehová.” Es posible que el libro fuera escrito seguido Nabucodonosor tomara a Jerusalén en el 588 A.C. Los edomitas celebraron la destrucción de Jerusalén. Hicieron fiesta en el infortunio de los judíos. Cinco años después (583 A.C.), Edom fue conquistada por Nabucodonosor.
I. LA HUMILLACIÓN DE EDOM
El pregón de Jehová tiene que ver con el decreto de Dios sobre Edom. Dios hace pregón o anuncia su voluntad y envía un mensajero, o sea, un ángel el cual va a las naciones para agitarlas en contra de Edom. El pecado de Edom tuvo como consecuencia que le sobreviniera el mismo mal que había venido sobre Jerusalén.
Dios es el que tiene el poder de engrandecer o humillar, de exaltar o abatir. El Señor anunciaba la humillación de Edom, pero ya en los ojos de Dios Edom había sido hecho pequeño. Aunque humanamente todavía no se veía esta realidad. En ese tiempo Edom abarcaba desde Arabia hasta Bosra en el norte.
Versículo 3 – Los habitantes de Edom solían construir sus casas en las rocas. Podemos ver evidencias de esta práctica en las ruinas de Petra. Habitaban en edificaciones en montes bien altos y dificiles de penetrar (e.g. las montañas de Afghanistan). Pensaban que nadie sería capaz de derribarles.
Versículo 4 -" Si te remontares como águila, y aunque entre las estrellas pusieres tu nido, de ahí te derribaré, dice Jehová." Esta escritura nos hace pensar en la carrera espacial que comenzo a la mitad del siglo 20. Rusia y Estados Unidos se afanaban por tener supremac ia en el espacio. Julio 20 del 1969 el Apolo 11 llega a la luna y con modulo espacial llamado "el aguila", le permite Neil Armstrong poner pie en la superficie. La arrogancia del hombre no termino con haber llegado a la luna. Su proxima meta es poder llegar a Marte, y quizas, como se ha descubierto hielo en sus polos, poder establecer una base en él. Ya Dios de antemano sabía lo que el hombre iba a intentar en el futuro. Esta palabra es la sentencia de Dios contra tal altivez.
Versículo 10 – "Por la injuria a tu hermano Jacob te cubrirá verguenza, y serás cortado para siempre." El Salmo 137:7 hace referencia a que decían los edomitas cuando supieron de la destrucción de Jerusalén por los Caldeos. "Oh Jehová, recuerda contra los hijos de Edom el día de Jerusalén, cuando decían: Arrasadla, arrasadla hasta los cimientos."
Versículo 12 – "Pues no debiste tú haber estado mirando en el día de tu hermano, en el día de su infortunio; no debiste haberte alegrado de los hijos de Judá en el día en que se perdieron, ni debiste haberte jactado en el día de la angustia." Proverbios 17:5; 24:17-18; Salmo 35